Tendrán unos 2 mm de longitud en su eje mayor.
Las hembras suelen poner entre 100 y 400 huevos, que deposita por separado, y generalmente los deja caer a tierra de manera que, en la naturaleza, se pueden confundir con semillas . En el terrario resultan relativamente fáciles de diferenciar de los excrementos utilizando una lupa de mano.
Cada huevo tiene un opérculo característico (en la foto se ve muy bien) y una cáscara gruesa, hecha de diferentes capas, con incrutaciones calcáreas.
En este grupo de insectos, es bastante frecuente que cuando los huevos no son fecundados por un macho den lugar a hembras (partenogénesis).